Es difícil que alguien pueda llevar un diario donde prime lo personal y no aburra hasta las ovejas con cuentos adolescentes de amores imposibles o con estados de ánimo que parecen montañas rusas más que sentimientos cotidianos.

Gusanillo lo consigue, es simple, amena y eficaz a la vez, algo casi imposible de encontrar entre las miles de páginas personales que pueblan internet. Desde su simplicidad engancha más que por lo que cuenta, por como lo cuenta, su estilo sutil y agradable hacen de la lectura de su blog una buena experiencia, que sin llegar a gran altura literaria, tiene el entretenimiento asegurado en cada post.

Si a esto le añadimos que de vez en cuando publica links interesantes, habrá que ponerla en la lista de favoritos cuando uno quiera alegrarse el día.

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