... hay poca humildad y mucha arrogancia en el mundo de los blogs. Nos pasamos en excesos y nos creemos pronto con derecho a hacer cualquier cosa por el simple hecho de haber logrado puntualmente un caso sonoro.

Tenemos cierta tendencia al endiosamiento y a pensar que siempre acertamos, cuando la verdad es que nos equivocamos con frecuencia.

Ahora que para muchos hemos "triunfado" podríamos caer en el error de instalarnos en la petulancia y el galleo. Es justamente de lo que hay que huir.

Este ha sido un proyecto sencillo, de mucho perseverar en el esfuerzo huyendo de los tantanes de los agoreros de las pozas que nos liquidaban cada hora. Huyendo de los rumores, de los calumniadores, de los instigadores....

Alegra ver en nuestra grada a los antiguos fabuladores. Es bonito observar como crecemos en hinchada a medida que se desinfla la de quienes hasta hace poco ladraban, a pesar de que no cesan en seguir lanzando dardos envenenados una y otra vez

Acostumbrados como estamos a que nos obliguen a vivir entre los parches de un día para otro, a que todo cristo se vuelque en el morbo de intentar saber en privado (-ni una, no han dado ni una-) quien es "borjamari", (a la vez que nos ningunean hipócritamente en público), a las directrices diseñadas por el "autoimportante" de turno, el cuñado del "autoimportante" de turno, o el que mejor le ha lamido el culo el último mes al "autoimportante" de turno, a los que lo único que les importa es la puta foto de prensa o la reseña del día siguiente, a los golfos, a los meapilas de sacristía bloguera, a la estúpida arrogancia de los que se creen que mandan y al rencor cainita, demoledor, de los que por salir dónde sea están dispuestos a sacarse un ojo si al adversario le sacan dos... no deja de ser una "victoria" haber llegado hasta aquí.

A pesar de que cierta rabia es inevitable al ver lo que algunos (precisamente a los que más se les llena la boca hablando de "libertad") son capaces de hacer para censurarnos, ni puñetero caso de la "enésima-última" ofensiva para que desparezca "borjamari", ("... que parezca un accidente...").

Lo "sentimos", pero seguiremos. Bastaría con que algunos se tomaran "esto" menos en serio, ganariamos todos.