Top blogs ... o cómo demostrar que el idea-lista es aquel que al darse cuenta de que las rosas huelen mejor que el repollo, deduce que también darán mejor sopa.

El diseño es muy bonito, no lo niego. Incomparable, que diría el otro. El conjunto muy aceptable, cierto. Pero incómodo de ver y, sobre todo, de leer es un rato largo. Se lo juro. Y es que la lista que tan pomposamente (baja modesto que suben los de la sociedadlimitada) han bautizado como "topblogses" es un placer y un lujo de virguerías miniminibarrocas, pero me dejan para el arrastre. A saber: contracturas varias, culo plano y pérdida gradual de la vista (yo, no la lista).

Quizá sea necesario un pacto con el diablo para solucionarlo, pero hace falta una revisión. Urgente. Sobre todo visual. A estos chicos hay que agradecerle el esfuerzo por intentar adornar su (inventado) inventario echando mano de elementos humorísticos, pero su puesta en escena resulta un tanto embarullada y abrupta y el resultado final aburrido y tedioso. Es una pena que se pierda uno entre tanto simbolito, entre tanto icono infantil y tanta estrellita que lo único que consiguen es que se parezca al decorado de cualquier vidente de una televisión local.

¿Del contenido de la lista? Paso. Todos sabemos que los números son los que son, aunque dependiendo del cristal con el que se mire, cambian completamente su interpretación. Y a mí, como a la gran mayoría de los bitacoreros a los que mirarse el ombligo les parece no sólo una ordinariez (eso sí, yo soy muy ordinario) sino una forma estúpida (eso sí, yo soy muy estúpido) de perder el tiempo (o de escribir post en medio de un ataque de solemnidad -y con la moral tocada- reivindicando lo bien hecha que está la lista propia y los errores garrafales que tienen la de los demás. Un post que hay por ahí -con sus réplicas y contrarreplicas- tratando de poner "los puntos sobre las íes" -que mieeeedooo- es todo un ejemplo del círculo de tontería en que se mueven estos chicos que hasta se las toman en serio -es bueno salir más... aunque ya haga frío-, -y no le pongo link, porque lo contarían como link a su blog, y yo me estoy refiriendo a la empresa-).

Al menos el resto (y somos muuuuuuuuuuchos más) tenemos claro que no hay cosa más tonta que una lista (sobre todo si se intenta presentar como tal). Ni más manipulable: la antológica frase que suelta cierto merodeador en el mismo blog -subconsciente en mano- lo deja bien claro: “Si quieres que (...) sea efectivamente el número uno, además de seguir trabajando muy bien en los contenidos como hasta ahora, pasad vuestros feeds a feedburner” (sic).

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